Esta joya del archipiélago de las Islas Baleares, con tan solo 41 kilómetros de largo, tiene mucho que ofrecer a sus habitantes y visitantes.
Además de sus incomparables y famosas noches de fiestas infinitas, cuenta también con hermosas calas y playas de aguas turquesas, inigualables parques naturales, pintorescos pueblecillos tradicionales y deliciosos platos típicos.
La “Isla Blanca” como tradicionalmente se le conoce, posee más de 50 calas donde puede disfrutar de un lindo atardecer de verano. Entre ellas están Cala Conta, Cala Vadella, Cala Salada, Cala de San Vicente, Cala Portinatx y Cala Gracioneta. Entre sus playas más famosas, donde vivir el verdadero ambiente de Ibiza están Playa d’en Bossa y Playa Salinas.
Si busca lo auténtico, además de playas, San Carlos, Santa Getrudis, Ibiza y San Antonio, son ciudades mágicas, de casas blancas, atardeceres hermosos… ¡un entorno típico del Mediterráneo!
Otro de los sitios que no puede dejar de conocer es La Cueva de Can Marçà; una impresionante cueva de más de 100.000 años de antigüedad que se encuentra ubicada en el interior de un acantilado.
Las mejores discotecas del Mundo se entremezclan con el glamour de sus chiringuitos y la belleza de sus calas… Pero esto no es todo… ¡Se dice que en Ibiza está la puesta de sol más hermosa del Mediterráneo!
Este destino en el Caribe mexicano es considerado como un paraíso playero caribeño de arenas claras, finas y suaves, basado en el ecoturismo para respetar la flora y fauna que